En 1860, una cochinita protagonizó un acontecimiento extraordinario en las tierras del Valle El Raposo de
Extremadura, España. Era una cochinita que sufría inflamación en las patas y que encontraron cubierta de barro en una
charca. Pensaron que estaba muerta, pero para sorpresa de todos, se levantó llena de energía y sin síntoma de
enfermedad. La noticia se extendió rápidamente. Muchas personas se acercaron a probar los lodos curativos. El lugar
pronto se hizo famoso y hoy en día nuestro viñedo se encuentra enclavado en dicho Valle. Nuestra Cochinita representa
las propiedades curativas de nuestra tierra, otorgándole unos poderes que la hacen invencible.